Durante el último mes, la administración pública en Tijuana ha sido escenario de un conflicto constante entre la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez y varios regidores del Cabildo. La falta de asistencia de los regidores a las sesiones extraordinarias convocadas por la alcaldesa desembocó en tensiones y acusaciones mutuas.

El conflicto comenzó a ser más visible el 26 de junio, cuando la regidora Marisol Hernández Sotelo justificó su ausencia en una sesión del Cabildo. Hernández Sotelo, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, alegó que el tiempo para revisar los temas a tratar había sido insuficiente, ya que la notificación se recibió un día antes. Entre los temas destacados se encontraba la concesión de un servicio público de arrastre y almacenamiento de vehículos a la empresa Asistencia Vial S. A. de C. V., decisión que, según Hernández Sotelo, debería consultarse con la administración entrante.

El 9 de julio, se convocó a una sesión extraordinaria del Cabildo en la que solo asistieron la alcaldesa Caballero Ramírez y el regidor de Morena, Óscar Manuel de Oca Rodríguez. La ausencia de 14 regidores y el síndico impidió que se alcanzara el quórum necesario, lo que llevó a la alcaldesa a programar una cuarta sesión para el día siguiente.

El 11 de julio, por cuarta ocasión, la mayoría de los regidores no asistieron a la sesión convocada. Solo estuvieron presentes la alcaldesa y siete regidores, lo que nuevamente impidió el quórum. La alcaldesa informó que la próxima reunión se realizaría hasta nuevo aviso y mencionó la posibilidad de iniciar un Juicio para la Protección de los Derechos Políticos Electorales del Ciudadano (JDC) debido a la inasistencia de los regidores.

El 15 de julio, por sexta ocasión, la sesión extraordinaria fue diferida debido a la falta de quórum. La alcaldesa señaló que algunos regidores habían justificado sus ausencias alegando motivos inherentes a sus cargos, aunque la alcaldesa comentó haber visto en redes sociales que algunos de ellos estaban en fiestas o en Estados Unidos.

La alcaldesa Caballero Ramírez anunció que se podría convocar a los regidores faltistas mediante un "Juicio Vía Constitucional" (JVC), advirtiendo que, de no asistir, podrían perder sus derechos electorales. La falta de quórum ha impedido la aprobación de temas importantes como la compra de un terreno para bomberos en Zona Centro y la condonación de multas y recargos del impuesto predial.

El conflicto entre la alcaldesa y los regidores refleja una profunda división en el Cabildo de Tijuana, afectando la gobernanza de la ciudad y retrasando decisiones cruciales para la comunidad.

Esta tarde, por solicitud de los propios regidores, se sostuvo un encuentro con la alcaldesa a puerta cerrada para negociar una futura reunión previa para una sesión de cabildo. Los regidores que acudieron a la audiencia fueron Claudia Casas Valdés, Miriam Echeverría Gastélum, Marisol Hernández Sotelo, Alejandro Cabrera Acosta, Mónica Lucero Vázquez, Edgar Montiel Velázquez y Erwin Jorge Areizaga Uribe, además de la presencia de Oscar Montes de Oca Rodríguez y Sandra Betsaida Magaña Ríos.