Debido a las posiciones actuales del planeta Tierra y de Marte, que se encuentran en lados directamente contrarios del sol, las comunicaciones con los robots que la NASA ha desplegado en Marte a través de los años están inhabilitadas. Los más famosos de los afectados son los robots Curiosity y Perseverance.

Aunque esto representa un gran inconveniente, este no es un fenómeno raro. Cada dos años se produce una “Conjunción Solar”, que se caracteriza porque las órbitas que siguen la Tierra y Marte ponen a ambos planetas en lados contrarios del sol. 

El problema para las comunicaciones nace por las emisiones que el sol genera. La corona del astro mayor de nuestro sistema expulsa constantemente gas ionizado, el cual es infame por corromper señales de radio. Mientras el sol esté entre ambos planetas las ondas de radio necesarias para la comunicación tendrán que atravesar dicho gas ionizado, que corromperá la señal.

La corrupción de la señal es especialmente problemática porque no solo significa que la señal “no llegue” al planeta rojo, si no que es alterada por el gas ionizado lo que podría provocar que los robots se comporten de manera inesperada cuando la reciba, lo que podría provocar daños en el equipo. Es por esto que durante la Conjunción Solar la NASA se abstiene por completo de intentar comunicarse con los robots. 

Este problema, como se mencionó antes, es cíclico y se resolverá por sí mismo cuando ambos planetas continúen avanzando en sus órbitas y por tanto dejen de estar de lados contrarios del sol. La conjunción solar tiene una duración de tan solo dos semanas, después de las cuales se podrá establecer comunicación de nuevo de forma paulatina.