"¡Saludos!", exclamó el actor Samuel L. Jackson, ataviado como el Tío Sam, al presentar a Kendrick Lamar en el Caesars Superdome de Nueva Orleans para el espectáculo del medio tiempo del Super Bowl 2025. La elección del rapero como protagonista de este codiciado escenario representó una decisión creativa imponente y trascendental, convirtiéndolo en el primer artista de hip hop en liderarlo en solitario.

Si quedaban dudas sobre la capacidad del ganador del Premio Pulitzer para ofrecer un espectáculo inolvidable, quedaron disipadas de inmediato.

Durante casi 13 minutos, en una presentación patrocinada por Apple Music y Roc Nation, Lamar se adueñó del escenario. Abrió con "GNX" y continuó con "Squabble Up".

Un grupo de bailarines vestidos de rojo, blanco y azul lo acompañó. A pesar de los colores patrióticos, fueron descritos como "demasiado escandalosos, demasiado imprudentes, demasiado de barrio" por el personaje de Jackson, quien le recordó a Lamar que "jugara". Acto seguido, el rapero interpretó "Humble.", "DNA.", "Euphoria" y "Man at the Garden".

Lamar entonó "Peakboo" antes de insinuar la llegada de "Not Like Us".

"Quiero tocar su canción favorita, pero ya saben cómo les encanta demandar", comentó Lamar a las bailarinas, haciendo una clara referencia a Drake.

Es difícil exagerar la presencia de "Not Like Us" en la cultura popular. Con más de mil millones de reproducciones en Spotify, la pieza se ha convertido en un himno para Los Ángeles, un símbolo de unión comunitaria y una declaración contra la apropiación cultural. Además, se consolidó como un triunfo para Lamar en su mediática rivalidad con Drake. La canción también obtuvo los premios a grabación y canción del año en los Grammy celebrados la semana anterior.

Previo al Super Bowl, existía incertidumbre sobre si Lamar incluiría la canción en su repertorio. El tema lanza fuertes acusaciones contra Drake, quien respondió con una demanda por difamación contra Universal Music Group debido a la popularidad de la pista. ¿Habría repercusiones legales tras una interpretación en el evento deportivo más grande de Estados Unidos?

Los detalles sobre la presentación de Lamar habían sido manejados con gran hermetismo. Sin embargo, aseguró que su pasión por la narrativa se mantendría en el centro de su actuación. Entre las sorpresas confirmadas, se encontraba la participación de SZA, con quien Lamar ha colaborado en numerosas ocasiones. La cantante formó parte de su último álbum, "GNX", donde participó en canciones como "Gloria" y "Luther", esta última con samplers de Luther Vandross y Cheryl Lynn en "If This World Were Mine".

SZA apareció en el escenario para interpretar "Luther" y "All the Stars".

"Eso es lo que quiere América, algo agradable y tranquilo", mencionó Jackson antes de que Lamar entonara "Not Like Us". Para la ocasión, el rapero omitió la palabra "pedófilos" en la letra, cerrando con "TV Off".

El productor Mustard y la estrella del tenis Serena Williams acompañaron a Lamar en la coreografía de "Not Like Us", realizando el icónico crip walking.

¿Podría existir mejor publicidad que el escenario más grande del deporte estadounidense? Para Lamar, esta presentación representó otro hito en su consolidación como una de las figuras más influyentes de la música.

Aunque no era su primera aparición en un Super Bowl, ya que participó en 2022 como invitado en el show de medio tiempo junto a Dr. Dre, Snoop Dogg, Mary J. Blige, 50 Cent y Eminem, este evento lo posicionó como protagonista absoluto.

"El rap sigue siendo el género más impactante hasta la fecha", declaró Lamar en septiembre al confirmarse su participación en el show. "Y estaré allí para recordarle al mundo por qué. Eligieron al indicado".

No hubo lugar a dudas. Eso fue exactamente lo que sucedió el domingo por la noche.