Bajo la estimación de que las plataformas de redes sociales de Meta están dañando la salud mental de usuarios jóvenes, gran parte de los estados que conforman los Estados Unidos presentaron una demanda contra la plataforma madre de redes sociales como Instagram, Facebook y Messenger. 

Algunas de las características acusadas de resultar adictivas son las constantes recomendaciones personalizadas de noticias y notificaciones frecuentes que demandan constante atención de los usuarios.

El alcance de la demanda

La demanda federal fue presentada en California por 33 fiscales generales y en ella los estados alegaban que los productos de Meta habían provocado daños a menores y contribuido a la crisis de salud mental que se vive en los Estados Unidos.

“Meta ha generado ganancias a raíz del dolor de los niños intencionalmente diseñando sus plataformas con características manipulativas que vuelven a los niños adictos a sus plataformas y reducen su autoestima” dijo Letitia James, la fiscal general representando al estado de Nueva York en la demanda.

Además de los 33 en este caso, 8 fiscales generales más demandaron a Meta por alegaciones similares en varias cortes estatales en todo el país, por lo que el caso involucra a la mayoría de estados del país.

Florida en específico demandó a Meta en un caso federal separado, con la alegación de que Meta engañó a sus usuarios respecto a los riesgos potenciales a la salud por el uso de sus productos.

El caso contra Meta

Según el fiscal general de Colorado, Phil Weiser, la oleada de demandas es el resultado de una investigación llevada a cabo en múltiples estados que comenzó en el año 2021. Las declaraciones se dieron después de que la denunciante Frances Haugen presentará decenas de miles de documentos internos de la compañía que ella estimaba demuestran que la compañía sabía de los problemas mentales que las plataformas de redes sociales que manejaban podían causar a usuarios jóvenes.

Además las demandas llegan tras una tendencia legislativa en Estados Unidos de poner más restricciones a redes sociales a través del establecimiento de nuevos requerimientos para las plataformas que quieran llegar a un público infantil y adolescente, tales como requerir consentimiento de los padres para poder crear cuentas en las mismas.