Recientemente México recuperó su Categoría 1 en seguridad aérea, otorgada por la Administración de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés), por lo cual según un análisis de Moody's Investors Service, está mejorará la calificación de seguridad aérea abrirá una puerta de oportunidades para las aerolíneas del país, permitiéndoles expandir sus servicios y rutas.

 

La decisión de la FAA, anunciada el pasado 14 de septiembre, revierte la clasificación de seguridad aérea de México que había caído a Categoría 2 en mayo de 2021. Esta reevaluación permitirá a México añadir nuevos servicios y rutas aéreas hacia Estados Unidos. Además, las aerolíneas estadounidenses volverán a vender boletos y ofrecer servicios compartidos en vuelos mexicanos.

 

El informe de Moody's destaca que esta noticia es especialmente beneficiosa para las aerolíneas mexicanas que atienden a viajeros internacionales, ya que podrán utilizar de manera más eficiente sus flotas. En particular, se menciona a Aeroméxico y Volaris como las principales beneficiarias de esta mejora en la calificación de seguridad.

 

Para Aeroméxico, esta recuperación llega en un momento crucial, ya que la Categoría 2 habría obstaculizado su plan de negocios, que incluye una cartera de nuevos pedidos de aviones. Por otro lado, Volaris tiene previsto redesplegar aproximadamente el 5 % de su capacidad total del mercado doméstico al mercado transfronterizo de Estados Unidos en el cuarto trimestre de 2023.

 

Además, se espera que las aerolíneas estadounidenses reactiven sus asociaciones con aerolíneas mexicanas, lo que mejorará la presencia internacional de estas últimas. Por ejemplo, Aerolíneas Delta de Estados Unidos mantiene una asociación con Aeroméxico, mientras que Frontier Airlines colabora con Volaris.

 

A pesar de esta noticia positiva para las aerolíneas, Moody's matiza que la recuperación de la Categoría 1 en seguridad de la aviación de México no tendrá un impacto significativo en los aeropuertos del país desde el punto de vista crediticio, ya que no se espera un aumento significativo en el volumen de tráfico de pasajeros. La industria aeroportuaria mexicana ha experimentado una fuerte demanda de viajes atendida tanto por aerolíneas locales como internacionales, lo que ha propiciado la recuperación de la mayoría de los aeropuertos en el país, con la excepción del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

 

En relación al AICM, la calificadora señala que su tráfico se encuentra al 97 % en comparación con los niveles prepandemia de 2019. Sin embargo, enfrenta desafíos importantes, como la alta congestión y la falta de un plan de inversión de capital para abordar este problema, lo que podría limitar su capacidad para acomodar el crecimiento orgánico de pasajeros a largo plazo.

 

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