Sheinbaum, la futura candidata presidencial de Morena, enfrentó un contratiempo en su campaña en un lugar que solía considerar su territorio: su propia ciudad, Ciudad de México. 

El partido convocó un evento masivo en el estadio Cruz Azul, ubicado en la alcaldía Benito Juárez, tradicionalmente favorable al PAN. 

A pesar de su capacidad para 36,000 asistentes, el estadio tenía una baja afluencia. Sheinbaum, que gobernó la ciudad desde 2018 hasta mediados de este año, cuando dejó su cargo para contender en la elección interna de Morena, decidió no asistir al evento debido a la falta de público.

El líder del partido, Mario Delgado, admitió la falta de organización frente a la escasa concurrencia y enfatizó la necesidad de mejorar la movilización y presencia del movimiento. Hizo un llamado a no fallar y propuso un nuevo mitin extraordinario, de mayor magnitud, para respaldar a Sheinbaum el 12 de noviembre.

El líder de Morena en Ciudad de México, Sebastián Ramírez, confirmó que Sheinbaum no asistió debido a la falta de convocatoria y solicitó una nueva fecha para encontrarse con las bases morenistas.

Los bloques que respaldan al gobierno actual y los partidos de oposición están compitiendo por el respaldo del electorado. Su estrategia incluye la formación de alianzas con figuras de influencia y la exhibición de su poder político, atractivo y carisma. La candidata Xóchitl Gálvez, quien representa al Frente Amplio, una coalición compuesta por el PAN, PRI y PRD, ha modificado su enfoque de campaña para acortar la brecha en las encuestas respecto a Sheinbaum. Por otro lado, Sheinbaum ha confiado en su posición de liderazgo en las encuestas sin tomar demasiados riesgos.

Con información de El País.