La policía japonesa arrestó a un hombre armado que se había refugiado dentro de una oficina de correos este martes. El hombre tuvo a una mujer como rehén encerrada consigo por más de 8 horas.

 

El hombre entró armado con una pistola a la oficina postal en la ciudad de Warabi, al norte de Tokio, una después de que se registrara un tiroteo en un hospital en la ciudad cercana de Toda. La policía relacionó ambos crímenes.

 

En el caso del hospital, un hombre entró al Hospital General de Toda Chou y disparó a dos personas, un doctor y un paciente de alrededor de 40 y 60 años respectivamente. Ninguno de los dos sufrió heridas de gravedad.

 

Tras los disparos se trasladó a la oficina de correos donde tomó a un rehén con el que estuvo encerrado y rodeado por policías durante más de 8 horas.

 

Imágenes en la televisión japonesa mostraban al hombre dentro de la oficina de correos portando lo que parecía una pistola amarrada a un cordón alrededor de su cuello.

 

Este tipo de incidentes son poco comunes en Japón gracias a las estrictas regulaciones que existen en el país respecto a la posesión de armas.