El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha expresado su preocupación y rechazo al plan migratorio en discusión en el Senado de Estados Unidos durante una llamada con el mandatario estadounidense, Joe Biden, el pasado martes. López Obrador afirmó que dicho plan, que incluye el cierre de la frontera y la expulsión de solicitantes de asilo hacia México, "no va a funcionar".

 

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“Les dijimos que ellos son libres y son soberanos como nosotros, y que pueden tomar la política o decidir sobre la política migratoria que ellos consideren más adecuada, sin embargo, nosotros pensamos que esa política no va a funcionar, que tiene que ver más con lo electoral”, mencionó el mandatario. 

 

Durante la llamada, López Obrador subrayó la importancia de la soberanía de ambas naciones y señaló que México no aceptará ser utilizado como moneda de cambio en asuntos políticos o militares, refiriéndose a la solicitud de restricciones en la frontera por parte de los republicanos como parte de un paquete de apoyo militar para otras naciones.

 

El presidente mexicano también calificó la medida de cerrar la frontera como "propaganda político-electoral" y destacó que esta no cuenta con el respaldo de la población estadounidense ni de las empresas, argumentando que sería inviable en términos prácticos.

“Están planteando cerrar fronteras. ¿Ustedes creen que eso lo aprueben los estadounidenses y los mexicanos? Pero, sobre todo, ¿lo van a aprobar los estadounidenses, las empresas? No aguantan, quizá un día sí, pero una semana no. Entonces, con todo respeto, es demagogia “, expuso. 

En lugar de estas medidas restrictivas, López Obrador presentó al presidente Biden diez propuestas alternativas sobre migración, que incluyen la regularización de mexicanos que llevan más de cinco años trabajando en Estados Unidos, así como el apoyo financiero a países pobres de Latinoamérica para abordar las causas subyacentes de la migración.

Además, el presidente mexicano propuso suspender las sanciones a Venezuela para mitigar la migración y levantar el bloqueo a Cuba. También abogó por mantener programas de recepción legal de migrantes en Estados Unidos, combatir el narcotráfico y el consumo de drogas, regular el comercio de armas hacia México y promover un plan de desarrollo conjunto basado en el T-MEC.

López Obrador reafirmó el compromiso de México de cooperar con Estados Unidos en materia migratoria, pero subrayó la importancia de respetar las soberanías de ambas naciones y trabajar en conjunto para abordar las causas fundamentales de la migración.

 

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