Un nuevo informe sobre el futuro de las condiciones climáticas extremas en Texas advierte que el estado se enfrenta a temperaturas más elevadas, una mayor severidad de las sequías y un creciente riesgo de incendios forestales.

 

El informe, elaborado por John Nielsen-Gammon, Climatólogo Estatal de Texas en la Universidad A&M de Texas, es una versión actualizada del 2024 de su informe original del 2021 titulado "Evaluación de las Tendencias Históricas y Futuras del Clima Extremo en Texas, 1900-2036".

 

Nielsen-Gammon elaboró el informe en colaboración con Texas 2036, una organización sin fines de lucro no partidista centrada en el futuro del estado. En 2036, Texas cumplirá 200 años y el grupo tiene como objetivo proporcionar estrategias a largo plazo basadas en datos para que el estado prospere durante algunos siglos más.

 

"Estas tendencias representan expectativas climatológicas", dijo Nielsen-Gammon en el informe. "El clima real de año en año y de década en década estará fuertemente influenciado por la variabilidad natural que en este momento es en gran medida impredecible".

 

Estos son factores climáticos que los texanos temen, combinando un calor insoportable con la posibilidad de desencadenar incendios mortales. Un estudio anterior incluso encontró que Texas está en camino de experimentar días de 125 grados Fahrenheit dentro de 30 años. En 2022, MedStar informó un aumento del 115.6% en llamadas de emergencia debido al calor en comparación con el año anterior.

 

Desde que las ciudades de Texas implementaron protecciones para los trabajadores durante días extremadamente calurosos, los casos de enfermedades por calor han disminuido en todo el estado.

 

Se espera que la temperatura superficial anual promedio en Texas para 2036 sea varios grados más cálida que en años anteriores. Los cambios proyectados en las temperaturas promedio implican cambios en las temperaturas altas o bajas también, escribió Nielsen-Gammon.

 

Si bien partes de Texas ya enfrentan un mayor riesgo de incendios forestales, como el Panhandle, el aumento de la sequedad en todo el estado podría expandir la amenaza hacia el este.

 

"Al mismo tiempo, las temperaturas más altas deberían permitir que se desarrollen condiciones muy secas más temprano en el año, alargando tanto la temporada de incendios forestales de primavera como la de verano", escribió Nielsen-Gammon.

 

Las condiciones de sequía afectan a la mayoría de los condados de Texas durante todo el año. El temor a perder aguas subterráneas es una preocupación cada año a medida que el estado rompe récords de calor. El agua es un recurso que los agricultores, ganaderos y la extensa área suburbana del estado consumen avidamente.

 

Según el informe de Nielsen-Gammon, es probable que las sequías en el estado se vuelvan más severas debido al aumento de las temperaturas y una mayor variabilidad de las precipitaciones. Para 2036, se espera un aumento del 7% en las pérdidas evaporativas en verano, lo que exacerbará las condiciones de sequía a medida que el agua superficial se seca más rápido. Mientras que la temporada anual de incendios forestales de Texas durante los meses de invierno tardío fue particularmente peligrosa este año.