El caso de la destrucción de un santuario para mascotas en San Carlos en el municipio de Ensenada generó indignación, no únicamente a nivel nacional, también internacional.

 

Esto gracias a que la propietaria del albergue, Guillermina Galván, difundió videos en los que se observa maquinaria pesada de una empresa dedicada a productos pétreos pasando por encima de la construcción de madera y dejando un saldo de 19  perros y tres gatos muertos.

 

El presidente municipal, Armando Ayala Robles, fue uno de los primeros en condenar el acto y aseguró que tomaría acciones contra los responsables y apoyaría a Guillermina con lo necesario para los animales sobrevivientes y la construcción del albergue.

 

Sin embargo, aunque la empresa fue clausurada, tan solo unos días después pudo reabrir y actualmente se encuentra operando sin ningún problema, como si no hubiera pasado nada.

 

Por su parte, Guillermina manifestó que unos empleados del ayuntamiento fueron unas horas para limpiar el terreno y llevarle unos costales de croquetas, pero esa ha sido toda la ayuda que le han brindado.

 

En lo que va del año se han presentado diversos casos de maltrato animal en Ensenada. El primero fue la clausura del albergue “Ellos son la razón” donde había más de 300 perros en condiciones de maltrato, ahí también Armando Ayala fue uno de los primeros en alzar la voz y condenar el hecho, pero fueron asociaciones de Estados Unidos las que realmente se encargaron de las adopciones y la atención médica de los animales sobrevivientes. Posteriormente, hubo el caso de una supuesta estética para mascotas donde la dueña fue exhibida en videos donde golpeaba a los perros con una escoba, nuevamente el alcalde apareció y realizó una transmisión para sus redes sociales donde aseguró que se regularían este tipo de negocios, lo cual hasta el momento tampoco ha ocurrido.

 

Finalmente, en este último incidente aseguró que el ayuntamiento ayudaría a Guillermina en la construcción de su vivienda que también fue destruida, lo cual costaría alrededor de 80 mil pesos, sin embargo, hasta el momento Guillermina continúa durmiendo en su automóvil porque la ayuda todavía no llega.

 

Así que Ayala solo se cuelga de los temas relacionados con el maltrato animal para decir que hará algo, pero al final pueden más los intereses.

 

Y es que Armando Ayala se encuentra desde hace meses más preocupado por buscar una candidatura al Senado que lo que sucede en Ensenada, mucho menos lo que pase con los animales.

 

Eso sí, cuando tiene oportunidad sale en supuesta defensa de las mascotas y hasta se lleva un perrito a su oficina.

 

Ayala no anda del todo bien en sus bonos, pues durante la campaña interna de Morena, por así decirlo, se rasgó las vestiduras por Adán Augusto López, cuyo lugar en la encuesta ya se sabe.

 

El presidente de Ensenada sigue trabajando en pro de lograr ser el candidato de Morena al Senado, y por ello hasta anda bacheando la ciudad y tratando de que se vea bonita. Lo malo es que dicen, que los arreglos son por encimita, y sí ha tapado los baches, pero ahora si solo de por donde pasa la suegra como dicen.

 

Aún y con eso dicen que no tiene nada fácil lograr la candidatura, pues no es cercano a la gobernadora, aún y cuando le dio la espalda a Jaime Bonilla por ella.

 

Así que habrá que ver qué otras acciones, aunque sea anuncia Ayala, porque eso de ayudar a las mascotas fue puro verbo.