El tifón Yagi ha causado una devastación masiva en el Sudeste Asiático, con más de 230 muertos y millones de afectados en la región. La tormenta impactó con fuerza el norte de Vietnam, donde las autoridades reportan 199 víctimas mortales y 128 desaparecidos. La aldea de Lang Nu, en la provincia de Lao Cai, es una de las zonas más afectadas, con un deslizamiento de tierra que dejó al menos 34 muertos y 61 desaparecidos. La remota ubicación de la aldea y las carreteras bloqueadas han dificultado las labores de rescate.

En Hanói, la capital de Vietnam, miles de personas han sido evacuadas debido al riesgo de desbordamiento de los ríos Rojo y Duong. Unicef ha alertado sobre la gravedad de la situación, con alrededor de 19 millones de personas, incluidos 5.5 millones de niños, viviendo en las áreas afectadas. Más de 141 mil hogares han sido dañados, junto con 550 instalaciones sanitarias y aproximadamente 800 escuelas.

El tifón Yagi también ha causado estragos en Tailandia, Birmania y Laos. En Tailandia, al menos 9 personas han muerto, mientras que en Birmania y Laos se han registrado inundaciones significativas. La ciudad laosiana de Luang Prabang está en alerta por posibles desbordamientos del río Mekong.

Antes de llegar a Vietnam, el tifón Yagi atravesó China y Filipinas, causando víctimas y daños importantes. En Filipinas, el tifón dejó 21 muertos y cerca de 3 millones de personas afectadas.