José Mujica, expresidente de Uruguay y una de las figuras políticas más icónicas de América Latina, ha declarado que enfrenta el ocaso de su vida debido al avance del cáncer en su hígado. Con la sinceridad y el carácter que siempre lo han definido, Mujica expresó: “Mi ciclo terminó. Sinceramente estoy muriendo, el guerrero tiene derecho al descanso”.

En una entrevista reciente, Mujica, de 89 años, compartió que su salud se ha deteriorado de manera irreversible, limitándolo a un punto en el que no es posible realizar más tratamientos médicos. “El cáncer me está colonizando el hígado, no lo paro con nada. ¿Por qué? Soy anciano y tengo dos enfermedades crónicas. No me cabe un tratamiento bioquímico ni una cirugía más porque el cuerpo no aguanta”, explicó con serenidad.

"Me quiero despedir de mis compañeros y mis compatriotas. Lo que pido es que me dejen tranquilo: no me acosen con la entrevista al pedo. Se terminó mi ciclo hace rato. Sinceramente me estoy muriendo y el guerrero tiene derecho a su descanso".

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— Juan Manuel Karg (@jmkarg) January 9, 2025

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El exmandatario, conocido por su vida austera y su lucha por la justicia social, también dejó claro que desea despedirse de sus compatriotas en paz. “Lo que pido es que me dejen tranquilo: no me acosen con la entrevista al pedo”, expresó, dejando entrever su cansancio frente a la constante atención mediática. Mujica ya había dado señales en los últimos años de querer alejarse de la vida pública para disfrutar de su retiro.

La noticia ha conmocionado a Uruguay y al resto del continente, donde Mujica es respetado por su liderazgo auténtico y sus reflexiones profundas sobre la política y la vida. Aunque el “guerrero” asegura que su ciclo terminó, su legado como un símbolo de humildad y compromiso social perdurará más allá de su partida.

Con esta declaración, Mujica busca cerrar un capítulo de su vida y centrarse en lo que considera fundamental: despedirse de su gente y vivir sus últimos días en tranquilidad. “Estoy condenado hermano, hasta acá llegué”, dijo, dejando claro que enfrenta el final con valentía y aceptación.